Nutrición oncológica

La valoración y el abordaje nutricional del paciente con cáncer tendría que formar parte desde el inicio del tratamiento a pesar de que la mayoría de veces no se hace.

Esto no quiere decir que una buena alimentación pueda curar el cáncer pero sí que un buen apoyo nutricional puede ayudar a afrontar mejor los tratamientos, minimizar los efectos adversos de estos: quimioterapia, radioterapia, inmunoterapia... y favorecer la recuperación y calidad de vida del paciente.

Los principales objetivos del acompañamiento nutricional son:

Evitar la malnutrición

por exceso o por defecto, cubriendo las necesidades nutricionales con un seguimiento estrecho a lo largo del tratamiento oncológico. Ayudarte a minimizar las complicaciones y mejorar la tolerancia y la calidad de vida.

Educación nutricional

para adquirir hábitos de vida saludables que puedan ayudar a prevenir recaídas de la enfermedad.

Adaptar la alimentación en función de cómo nos encontramos y de los efectos adversos del tratamiento.

Debido a los tratamientos y a la propia enfermedad se pueden producir efectos secundarios que afectan la alimentación y que tienen un impacto en la calidad de vida del paciente. Pérdida de hambre, náuseas, molestias digestivas, alteración del sabor… Des de la consulta os apoyaré para aliviar y tratar estos problemas.